Traductor autónomo versus traductor en plantilla

No importa que trabajes con una gran multinacional de la traducción o una pequeña agencia, son los traductores en su soliloquio ante el ordenador los verdaderos artífices de una buena traducción.
La profesión de la traducción es poco conocida por el gran público. La mayoría de las personas cuando piensan en un traductor piensan en un traductor literario. Sin embargo, el mercado de la traducción editorial es muy pequeño en comparación al de la traducción médica, jurídica, financiera, comercial o técnica.
Tampoco es conocida la circunstancia de que un elevado porcentaje de traductores trabajan como autónomos.
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1. Modelos de negocio de las empresas de traducción
Antes de valorar las ventajas y desventajas de trabajar con un traductor autónomo o uno en plantilla, necesitarás saber cómo trabajan las empresas de traducción.
En general, podemos afirmar que hay dos tipos de empresas de traducciones. Unas empresas tienen traductores autónomos en plantilla que se encargar de hacer las traducciones. En otras empresas, el equipo interno de la empresa está formado por gestores de proyectos y las traducciones la realizan proveedores externos.
En el caso de las primeras empresas, estás solo suelen trabajar en unas pocas combinaciones lingüísticas y sus clientes favoritos son grandes empresas de traducción.
En realidad, la mayoría de las empresas de traducción están entre estos dos extremos de modelo de negocios de empresas de traducción. De esta manera, habrá algunas combinaciones lingüísticas que hagan internamente y otras se realizarán externamente.
2. Especialización: traductor autónomo
Una de las características que debes buscar en los traductores que hagan tus traducciones tengan una gran experiencia y estén especializados en tu campo.
Si tu empresa pertenece al sector biosanitario, va a ser muy importante que el traductor esté especializado en traducción médica. El campo de la medicina y los productos sanitarios implica el uso de lenguaje especializado.
En este sentido, las empresas de traducción tendrán tendencia a utilizar sus traductores internos. Es posible que la empresa de traducción pueda trabajar con un traductor externo muy especializado en tu campo, pero difícilmente lo hará si no hay nada en el plato de su traductor en plantilla.
3. Compromiso: traductor interno
Siempre qué contratas a un profesional es importante contar con su compromiso para realizar tus proyectos de la mejor manera. En este sentido, cuanto más importante seamos como cliente para ese profesional, mayor nivel de compromiso podemos esperar.
Desde este punto de vista, creo que los traductores internos sienten un mayor compromiso con el trabajo que hacen en tanto que solo tienen un cliente: la empresa que los contrata.
Cuando un traductor en plantilla comete un error, comete un error ante su único cliente que lo puede poner de patitas en la calle si no hace su trabajo bien.
En el caso de los traductores autónomos, uno de los factores que afectará a su nivel de compromiso será el porcentaje que supongas en su facturación anual. ¡No le pidas el oro y el moro a un traductor autónomo cuando apenas le das trabajo!
4. Soporte técnico: traductor interno
A nivel técnico, puedes esperar un mejor servicio al trabajar con un traductor interno. Los traductores en plantilla van a formar parte de un equipo. En general, las empresas de traducción tendrán un responsable técnico que sirve de apoyo a los traductores de la empresa.
El caso de los traductores freelance puede ser muy variable. Habrá los que apenas se manejen con los aspectos puramente técnicos de la traducción, apoyándose a su vez en las agencias de traducción con las que trabajan.
Otros, por el contrario, sobre todo aquellos que trabajan con clientes directos, se habrán visto obligados a resolver las cuestiones técnicas necesarias para mantener este tipo de relación comercial directa.
5. Entonces, ¿trabajo con un traductor autónomo o con un traductor en plantilla?
Existen pocas verdades absolutas. Como he expuesto, en función de las características de nuestro proyecto, nos puede interesar, a priori, trabajar con uno u otro tipo de traductores.
Independientemente de los distintos factores que hemos expuesto aquí, el elemento más importante a tener en cuenta de un traductor, ya sea en plantilla o freelance, son sus competencias profesionales: que traduzcan a su lengua materna, que tengan estudios en traducción e interpretación, que hagan una última lectura como control de calidad…
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Josh Gambín es licenciado en Ciencias Biológicas por la Universidad de Valencia y en Traducción e Interpretación por la Universidad de Granada. Ha desarrollado diversas funciones como gestor de proyectos, maquetador, y traductor freelance y en plantilla. Desde 2002 es socio fundador de AbroadLink y actualmente desarrolla el cargo de Director de Ventas y Marketing.
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